Desde la Comisión Directiva del Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate venimos advirtiendo, una y otra vez, la grave situación laboral y salarial que Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NASA) impone a sus trabajadores.
Los salarios indignos por debajo de la línea de la pobreza que obligan a cargas horarias desmedidas no son errores ni «circunstancias»: son decisiones empresariales que hoy ponen al límite los ingresos salariales a todos los trabajadores que son los que día a día, y hace más de 51 años, sostienen el funcionamiento de las centrales.
El clima interno ya dejó de ser preocupante: es directamente insostenible.
La hostilidad promovida por la empresa estatal ya afecta la salud psicofísica de los trabajadores y compromete la seguridad de las instalaciones, algo que NASA está pretendiendo ignorar de manera irresponsable.
Ese deterioro social no solo se explica por la situación económica, sino que se extiende hacia otras prácticas, que pensábamos ya habían quedado en un pasado.
El hostigamiento, el amedrentamiento y las prácticas discriminatorias de ciertas gerencias y jefaturas son parte de una estrategia deliberada: de disciplinar, silenciar y desarticular, para intentar ocultar el descontento de los trabajadores, con el objetivo de acallar e impedir cualquier reclamo o manifestación legítima.
Quieren trabajadores extenuados, sometidos y callados, pero no lo van a lograr.
A los oportunistas de siempre, que hoy alimentan su egolatría de poder, aprovechando políticas circunstanciales de la conducción de NASA, les decimos claramente: Que una vez más ellos pasarán, pero los trabajadores y nuestra organización sindical seguirán de pie.
Y como tantas vez ocurrió, cuando este capítulo se cierre-porque se va a cerrar-, tendrán que hacerse cargo del daño que están provocando.
No habrá relato ni maniobra interna que pueda borrar la responsabilidad de quienes eligieron perseguir trabajadores en vez de defender el patrimonio energético nuclear, y cuidar las condiciones y derechos laborales de cada trabajador.
La historia del movimiento obrero se escribe claramente: cada intento de disciplinamiento cae, tarde o temprano; y este no será la excepción.
«Por los Derechos e igualdad de todos los Trabajadores»
Comisión Directiva Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate
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